JOSELITO Y SU FAMILIA:
Había una vez una rana que se llamaba Gustava y su marido llamado Gustavo y tenían 3 hijos. Eran 2 chicas y 1 chico las chicas ranitas se llamaban Julia y Julieta, eran gemelas y conseguían todo lo que querían y el sapo se llamaba Joselito y nunca le daban lo que él quería y Joselito tenía envidia de sus hermanas las ranas. Pero esa no era la mayor preocupación de Joselito, si no, que por las noches escuchaba hablar a sus padres del trabajo y el poco dinero que tenían. Él sabía que su madre estaba un poco pachucha porque llevaba muchos días sin comer, para que sus hermanas, su padre y él pudieran comer y vivir bien, Joselito no quería que fuera así. Él se preguntaba siempre muchas cosas como por ejemplo:
¿Y por qué no come?, ¿Y por qué no hace magia y saca el dinero que necesita?
Joselito se hacia muchas preguntas pero no encontraba ninguna respuesta para solucionar el problema.
Él le pregunto a su padre, y su padre le dijo que lo hacia por nosotros, Joselito seguía sin entenderlo, ¿Pero él que podía hacer? Pensó y Pensó... Y después de un buen rato, decidió compartir su comida con su madre, así no estaría tan pachucha, pero entonces él se quedaba con hambre, con lo cual se puso otra vez a pensar y... ¡¡¡Zas!!! Tenía la solución, que todos de la familia le dieran una porción de su plato al plato de su madre. Y así fue. Todos vivieron felices cazando muchas perdices.
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